Miembros de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación señalan que el mayor problema del Fusarium R4 es la gravedad de su propagación, ya que es una plaga con alto nivel de contagio. El FR4 ya ha sido catalogada como una de las enfermedades más destructivas del banano, debido a las innumerables pérdidas económicas que ha generado en África, Asia y que está comenzando a causar en Latinoamérica. El caso de este último es más grave porque la mayoría de la producción de banano que se realiza en América Latina es de la variedad Cavendish, que coincidentemente es el tipo de cultivo de banano que más se ve afectado por la plaga.

Según diversos expertos, la propagación del Fusarium R4 se da a través de los materiales vegetales y las esporas. Además, como este hongo se queda pegado en el suelo, se adhiere a las herramientas agrícolas, a los zapatos y a la vestimenta de los agricultores, y a los vehículos que se utilizan para transportar materiales y personal. De forma paralela, el drenaje del agua, el riego de los cultivos y las inundaciones también son actores importantes en el contagio.

_{Referencias: Organización de las Naciones Unidas. (2019). Fácil de propagar y difícil de eliminar, la nueva plaga que amenaza el banano y el plátano en América Latina.}